El condón es uno de los métodos anticonceptivos más accesibles, prácticos y eficaces para prevenir embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual (ETS). Sin embargo, para que sea verdaderamente efectivo, es fundamental usarlo correctamente. Aquí te explicamos paso a paso cómo hacerlo y cómo evitar que se rompa.
1. Verifica la fecha de caducidad
Antes de abrir el empaque, revisa la fecha de vencimiento. Un condón caducado puede estar reseco, frágil y más propenso a romperse.
2. Revisa el empaque
Presiona suavemente el sobre para asegurarte de que esté sellado con aire (como un pequeño cojín). Si está plano o dañado, deséchalo.
3. Ábrelo con cuidado
Usa los dedos, nunca los dientes ni objetos afilados como tijeras o cuchillos. Rasgar el condón por accidente es más común de lo que parece.
4. Coloca el condón correctamente
Asegúrate de ponerlo con el lado correcto hacia afuera (debe parecer un sombrerito). Si lo colocas al revés, no lo gires y lo uses de nuevo: desecha ese y usa uno nuevo.
5. Aprieta la punta
Antes de desenrollarlo, aprieta la punta del condón para dejar espacio para el semen. Esto reduce el riesgo de que se rompa durante la eyaculación.
6. Desenróllalo completamente
Deslízalo hasta la base del pene erecto. Asegúrate de que esté bien ajustado, pero no tan apretado que pueda romperse.
7. Usa lubricante (si es necesario)
La fricción excesiva puede hacer que un condón se rompa. Si sientes que se está secando, aplica un poco de lubricante a base de agua o silicona. No uses aceites (como vaselina, crema corporal o aceite de coco), ya que pueden debilitar el látex.
8. Después del sexo
Sujeta el condón por la base al retirar el pene para evitar que se deslice o se derrame el contenido. Luego, haz un nudo y tíralo a la basura (nunca al inodoro).
¿Por qué se rompe un condón?
Estas son algunas de las razones más comunes:
Fricción excesiva sin lubricante
Uso de lubricantes incompatibles
Condón caducado o almacenado en lugares calurosos (como la guantera del coche o la cartera)
Uñas largas o joyería al manipularlo
Ponerlo al revés y luego intentar reutilizarlo
En resumen:
Usar un condón correctamente no es complicado, pero sí requiere atención a los detalles. Si sigues estos pasos, estarás protegiéndote a ti y a tu pareja de forma efectiva.
Recuerda: el condón es más que una barrera física; es una herramienta de responsabilidad, cuidado mutuo y bienestar sexual.