Sí, algunas mujeres sí pagan por sexo, aunque en mucho menor proporción que los hombres. Este tema ha sido históricamente tabú, pero cada vez más estudios y reportajes lo visibilizan.
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¿Qué dicen las estadísticas?
Las cifras varían según el país y el enfoque del estudio, pero aquí te doy un resumen general basado en investigaciones previas a 2024:
1. Proporción baja, pero real
En países occidentales, entre 1% y 5% de mujeres admiten haber pagado alguna vez por sexo.
En contraste, entre 15% y 30% de hombres reconocen lo mismo.
2. Perfil común
Las mujeres que pagan por sexo suelen ser:
De entre 30 y 50 años.
Independientes económicamente.
En búsqueda de conexión física sin compromiso o con fantasías específicas (dominación, jóvenes atractivos, etc.).
Viajeras en países donde el turismo sexual es más aceptado (como Caribe, Sudeste Asiático o África).
3. Plataformas y formas modernas
Muchas mujeres lo hacen a través de escorts masculinos, webs de citas con pagos indirectos, o incluso en apps tipo Sugar Dating.
Algunas prefieren pagar por acompañamiento íntimo, emocional o experiencias de dominación/sumisión, no solo sexo explícito.
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¿Por qué es un tema oculto?
Estigma social: a diferencia de los hombres, culturalmente se espera que las mujeres "no necesiten pagar".
Roles de género tradicionales: se asume que los hombres son los que “buscan” y las mujeres son “buscadas”.
Pero el deseo femenino existe y se expresa cada vez con más libertad.